Preciosas calles de la ciudad vieja
En el corazón de Dalmacia, en la resguardada bahía de su Aspalathos (Split) natal, al sur protegida por las islas de archipiélago de Split y al norte por altas montañas.
La residencia de Diocleciano fue en su época una obra única, y a pesar de que diecisiete siglos de existencia continua le hayan robado muchas de sus características originales, como compensación la han ido enriqueciendo con obras arquitectónicas y artísticas realizadas posteriormente Entre ellas, podemos mencionar el majestuoso mausoleo del último emperador romano pagano, que fue transformado en catedral
católica consagrada a Duje. Este fantástico e irrepetible núcleo urbano, ha sido nombrado monumento de la más alta categoría y ha sido incorporado a la lista de UNESCO de los monumentos protegidos que pertenecen a la herencia cultural universal.
En su visita por el casco antiguo de la ciudad, no deje de ver el Palacio de Diocleciano, una gloriosa ciudadela, que sirve como un maravilloso punto de referencia del pasado. Recorriendo las calles de la Ciudad Vieja, asegúrese de detenerse en la plaza del Peristilo, que es la plaza central del Palacio, formada por pilares de granito rojo y una escalera que le lleva al templo de Júpiter. Históricamente rica, Split es una verdadera joya que podremos visitar a bordo de un barco. Una vez de vuelta en el puerto, podrá disfrutar de una espectacular comida mediterránea y un cóctel a bordo mientras observa la brillante puesta de sol. Por la tarde, puede bajarse del barco para caminar por La Riva, el famoso puerto de Split. Tal vez incluso parando para tomar un postre de sus elegantes restaurantes y bares de la ciudad de Split.
Las playas de Split son espectaculares, Bačvice Beach es una de las mejores playas de Croacia. Navegue hasta las playas de Kašjuni podrá ser atendido por los restaurantes locales mientras se relaja. Con la privacidad que tiene a bordo, tal vez desee navegar por algunas de las calas menos conocidas.
