Propulsión híbrida: Heesen trabaja hacia soluciones sostenibles
Heesen Yachts, en los Países Bajos, celebró una conferencia de prensa para hablar del futuro de la propulsión híbrida y de las opciones de soluciones sostenibles en el sector. Fue organizada, en parte, a bordo del superyate Heesen Amare II de 49,8 metros de eslora, el segundo yate híbrido de la compañía construido en el año 2020. Entre los invitados, se encontraban el director general Friso Visser, el director comercial Mark Cavendish, el especialista en sistemas híbridos Erik Van Mourik y el arquitecto de sistemas eléctricos e híbridos Peter Dijkstra. El equipo también contó con la presencia de Robert van Tol, fundador de Water Revolution Foundation, una empresa con sede en los Países Bajos que busca soluciones sostenibles para el sector de los yates.
El debate versó sobre cómo Heesen había dado el salto a la propulsión híbrida con la construcción del Proyecto Nova, ahora conocido como el yate a motor Home, de 49,8 metros de eslora. A pesar de la apuesta, el riesgo del astillero ha merecido la pena, ya que cada vez más clientes solicitan sistemas híbridos, así como la innovación de los cascos de desplazamiento rápido (FDHF). Los cascos FDHF son considerablemente más eficientes, y Peter Dijkstra sugiere que pueden mejorar la eficiencia hasta en un 40%.
Home fue entregado en el año 2017, y desde entonces Heesen ha construifo un buque hermano, Amare II. Ahora Heesen está desarrollando un sistema de ahorro de picos que utiliza baterías para almacenar el exceso de energía producida por los generadores, lo que significa que se utiliza el 100% de la energía creada a bordo.
Por el momento, se tiene la sensación de que los clientes están impulsando el movimiento hacia soluciones sostenibles, pero Heesen está trabajando para tomar las riendas desde la perspectiva de los constructores navales, y preparar las innovaciones antes de que sean demandadas.
La propulsión híbrida consiste en ahorrar energía, y el Home y el Amare II han demostrado que el sistema funciona, ya que el Home está propulsado por dos motores de 660 kilovatios y siguen ofreciendo velocidades más rápidas que otros barcos de su categoría. El sistema también tiene la ventaja de no producir hollín, ruido y reducir las emisiones cuando funciona con propulsión eléctrica, normalmente durante las maniobras.
El grupo de expertos observó que cada día se producen avances tecnológicos y que las ciudades y los puertos deportivos están cada vez más concienciados con la ecología, por lo que cree que no pasará mucho tiempo antes de que se prohíba por completo la propulsión diésel en los puertos y las marinas.